El aceite de girasol prensado en frío se ha convertido en el nuevo favorito del mercado de aceites de cocina de alta gama. ¿Por qué? Comencemos por desglosar el proceso integral de extracción, que abarca desde la selección de materias primas hasta el refinado a baja temperatura. En cada etapa, el control de temperatura es crucial. Durante la selección de materias primas, se eligen semillas de girasol de alta calidad, lo que es la base para obtener un aceite de alta calidad. Luego, en la etapa de trituración a baja temperatura, se mantiene una temperatura por debajo de 60°C para evitar la pérdida de nutrientes y el deterioro de los componentes activos.
Después de la trituración, se lleva a cabo la extracción suave, donde la temperatura sigue siendo controlada para preservar al máximo el sabor natural y los componentes nutritivos activos. Luego, a través de la filtración precisa y el refinado a baja temperatura, se obtiene un aceite de girasol prensado en frío de alta calidad. Este proceso de extracción en frío, con un control estricto de la temperatura por debajo de 60°C, permite conservar el sabor natural y los componentes nutritivos activos del aceite de girasol.
Hay diferencias significativas entre el aceite de girasol prensado en frío y el prensado en caliente, tanto en términos de experiencia sensorial como de valor saludable. En cuanto a las características sensoriales, el aceite de girasol prensado en frío tiene una aroma más puro y una coloración más clara en comparación con el prensado en caliente.
En cuanto a la conservación de nutrientes, el aceite de girasol prensado en frío conserva una mayor cantidad de vitaminas y antioxidantes. Por ejemplo, la tasa de conservación de vitamina E en el aceite de girasol prensado en frío es de hasta el 95%, mientras que en el prensado en caliente es solo del 70%. Además, el aceite de girasol prensado en frío también conserva más fitosteroles, que tienen beneficios para la salud, como ayudar a reducir el colesterol en sangre.
Un informe de la industria muestra que los consumidores cada vez están más preocupados por la salud y la calidad de los alimentos, lo que ha impulsado la demanda creciente de aceites de cocina de alta gama, como el aceite de girasol prensado en frío.
Para las pequeñas y medianas empresas y las marcas de aceites de alta calidad, el uso de tecnología de prensado en frío puede crear una ventaja competitiva diferenciada. En cuanto a la selección de equipos, se recomienda considerar máquinas de prensado en frío helicoidales y sistemas de desolventización al vacío. Estos equipos pueden garantizar la calidad y la eficiencia de la producción de aceite de girasol prensado en frío.
En cuanto a la detección de calidad, se deben establecer índices de detección de calidad, como el valor ácido y el valor de peróxido. Además, es importante cumplir con los requisitos de etiquetado, como la norma GB 2716, para garantizar la transparencia y la confiabilidad de la información del producto.
Actualmente, el mercado de aceites de cocina de alta gama está experimentando un crecimiento constante. Los consumidores están cada vez más dispuestos a pagar más por aceites de alta calidad que ofrecen beneficios para la salud. La tecnología de prensado en frío no solo puede preservar la calidad y los nutrientes del aceite de girasol, sino que también puede aumentar el valor añadido de la marca.
Al adoptar la tecnología de prensado en frío, las empresas pueden crear una imagen de marca más saludable y de alta calidad, lo que les permite destacar en el mercado altamente competitivo.